sábado, 10 de noviembre de 2007

Live in Trebujena (I - antes del apocalpisis)


Como muchos o todos ya sabéis estoy en un grupo...bueno, rectifico, me junto con unos notas ;) algunos fines de semana para sacar la guitarra un poco de casa y ensayar unos temas de hard rock, heavy/rock, o como querais llamarlo.

Nuestro repertorio actual se basa en temas de Judas Priest, Platero y Tú, AC/DC, Iron Maiden, y alguna cosilla más. De vez en cuando, si vemos que la cosa entre todos está más o menos preparada y tenemos tiempo y ganas, nos buscamos algún mal lugar donde tocar, bajo el críptico nombre de 'Uma H.R.' y puedo aseguraros que es una de las actividades con la que más disfruto: echamos siempre un buen rato, sin demasiada seriedad (aunque pongamos caras de agresividad cuando la música lo requiere) y, con nuestros fallos, siempre acabamos haciendo un poco el loco en el escenario y afortunadamente contagiando las buenas (y ensordecedoras) vibraciones al público (¡vale que muchos son nuestros colegas o familiares pero siempre se anima gente ajena eh!)

Y ya que los exámenes no se nos han echado del todo encima y que hacía poco de la última actuación en el festival solidario en Lebrija - ver vídeo · ver crónica (yes I am the one with the red t-shirt, y sí, sin comentarios sobre la locutora del vídeo...) para éste pasado Viernes 9 nos agenciamos un segundo concierto para ésta minigira; probablemente el último con la formación actual, por incompatibilidades que son otra historia. Para tocar en un Pub/Discoteca de Trebujena nos hicimos acompañar por los chavales de Sanlúcar de Barrameda, Bulo, y nuestra banda hermana Crisálida y sus clásicos modernos de pop/rock de voz femenina.

Después de un entretenido día, en el que la hermana de Joaquín se comió mi empanada creyendo que era suya pues al fin y al cabo en su frigorífico estaba, y tras la tarde de rigor de prácticas en Canal Sur, cogí un accidentado y concurrido tren para Lebrija, junto con dos componentes de Bulo y otro más de mi grupo. Nos abalanzamos sobre cuatro sitios libres que encontramos casi de milagro, pues la estación de San Bernardo estaba petada de pasajeros (y qué buenas pasajeras universitarias había, todo sea dicho). Cabe apuntar como uno de los chavales de Bulo, que había quedado con su novia en el tren (ya que ella se montaba en Santa Justa) no la pudo encontrar! Lo que nos reímos al verlo ir de un extremo del tren a otro, ya que el tío no tenía saldo...viva la comunicación en la pareja, dijimos. Al llegar a Lebrija resultó que la novia estaba en otro vagón, al que no se podía acceder, y fuimos recogidos en la estación de Lebrija por 'el Varilla'.

Creo que sólo en Lebrija se puede uno encontrar a personajes como 'el Benito' (un cincuentón medio esquizofrénico que se ha pasado alguna vez por los ensayos y tenía un programa en la radio del pueblo), 'el viejo Joseba' (un entrañable motero con más años que mi padre, de origen vasco pero afincado allí desde nadie recuerda cuando, que aparece ataviado con su inseparable chupa de motero cada vez que tocamos, para felicitarnos y aconsejarnos que seamos más rebeldes) o el Varilla, enviado por nuestro cantante el Sánchez para llevarnos a Trebujena en coche. Éste amable conductor nos amenizó el trayecto con canciones de Metallica, Judas y Boikot, sobre las que coloquialmente disertó en torno a su preferencia para con el comunismo antes que el capitalismo, aludiendo al problema de la vivienda, cómo disfruta tanto el punk como el "jebi", o sobre cómo si el Che Guevara levantara la cabeza nos mandaba a todos al carajo, ademas de cagarse un poco en la puta al no poder beber esa noche. El Varilla me contó que Joseba iba a venir, por lo que aproveché para preguntarle por la historia de éste, a lo que me contó que él vino del País Vasco porque se echó una novia en El Puerto de Santa María, pero ya hace tiempo cortaron. Ya bueno, pero ¿y que tiene que ver eso para vivir en Lebrija? Pues nadie lo sabe (quizás Joseba se puso a volverse al País Vasco en moto, pero enamorado de Andalucía cambió de opinión y se bajó en el primer pueblo que pilló para comenzar una nueva vida... Joseba y Varilla si algún día leeis esto que sepais que es desde el cariño). Respecto a si Varilla era apellido o mote, y por qué, preferí no investigar.

Al filo de las nueve y media de la noche una pequeña nube de sombras negras se apostaba a las puertas de un pequeño antro cerca del recinto ferial de Trebujena. El Varilla nos aparcó allí en la misma puerta, (y salí de aquel coche que olía a cuadra...bueno no tanto) y una vez realizados los saludos de rigor (que pasa puta, y esas cosas) empezamos a descargar la mesa de sonido, la batería, las guitarras, los cables, el amplificador, el amplificador, el otro amplificador... La cosa se calentaba, el trono nos esperaba...el príncipe llegaba! :P

2 comentarios:

Pablo H dijo...

Que emocionante, ansío saber mas

Anónimo dijo...

este tio es la polla.
Que bien hubiera quedado lanzar la tele haciendo el discóbolo. En fin, otra vez será.